En un futuro donde el consumo y la comodidad dominan, la sociedad parece segura y estable, dividida en diez zonas perfectamente organizadas. Sin embargo, este mundo ha sacrificado valores humanos esenciales, y sus habitantes son procreados in vitro, moldeados como si fueran productos de una cadena de montaje. Una visión inquietante de un futuro distópico que sigue resonando con fuerza en la actualidad.